Hay que ver lo bien que se manejan nuestros políticos con el uso del lenguaje. Cada día que pasa se aplican mas para dar una vuelta de tuerca al
vocabulario y a través de las palabras cambiar el
significado de los hechos.
Un ejemplo muy claro lo tenemos estos últimos días con la palabra copago,
palabra que sorprendentemente no se encuentra en el diccionario de la RAE, pero
que la mayoría de los mortales
interpretamos como pagar una cantidad compensatoria para acceder a ciertos
servicios y ciertamente así es, este es un término acuñado por los servicios de
medicina privada para pagar servicios que no cubren totalmente las compañías de seguros.
Este concepto pese al intento de CiU y PP no puede
aplicarse a la medicina pública ya que los servicios son
pagados por todos a través de los impuestos, es
obligación del gobierno de turno dar
estos servicios de forma eficiente ya que la sanidad como la seguridad y la
educación son servicios obligatorios
en contrapartida si podría aplicarse en otros servicios
tanto autonómicos como estatales no
obligatorios, como televisiones públicas, doblajes de películas aplicando una tasa en taquilla o evitando en los
presupuestos los gastos superfluos o inútiles a los que nos tienen
acostumbrados.
Lo que aplican no es copago es repago,volver a pagar dos veces por el mismo servicio.